Pendientes encanto (grandes)

Nuestros pendientes no solo están hechos a mano, sino que también son pintados a mano, añadiendo un toque de autenticidad y originalidad a cada diseño. 

El proceso de creación es un verdadero acto de amor y paciencia, que lleva aproximadamente 4 días para completarse:

Desde el corte del molde de porcelana hasta el acabado final, cada etapa es crucial para alcanzar la perfección. Después de cortar el molde, se repasan las líneas y errores, y la pieza se deja secar hasta alcanzar una dureza llamada “hueso”. Luego, se somete a un horneado a baja temperatura (960ºC), seguido de un proceso de esmaltado que dura aproximadamente un día entero.

Una vez esmaltados, los pendientes vuelven al horno para alcanzar su color final, en un proceso que dura unas 12 horas en promedio. Este meticuloso proceso de creación es imprescindible para apreciar verdaderamente el valor y la belleza de cada pieza única.

Sumérgete en la exquisitez de nuestros pendientes de porcelana, donde la tradición artesanal se fusiona con la modernidad para crear joyas que trascienden el tiempo. Con su elegancia atemporal y su exclusividad inigualable, estos pendientes son mucho más que accesorios: son expresiones de arte que cuentan historias y despiertan emociones.